A comienzos del siglo XX, el triunfo de las masas se tenía como una certeza; sin embargo, en las décadas finales, esas masas se encontraron cautivas de sus dirigentes. Cuando las revoluciones triunfan, los regímenes se suceden y las instituciones del pasado se derrumban, la ascensión de los grandes dirigentes prosigue inevitablemente. Una sola ciencia ha abordado el tema del poder de los líderes: la psicología de las masas o de las multitudes.
En esta obra, Serge Moscovici busca adentrarse en el corazón de una ciencia que contempló a nuestra época sin amabilidad y que ha estudiado la inclemente dominación del hombre por el hombre. El autor expone las razones del nacimiento de la psicología de las masas y los temas que trata. Describe las multitudes, los líderes y el método predominante para gobernar a las primeras, popularizado por la publicidad. Y, tras haberse referido a la invención de esa rama de la psicología por Gustave Le Bon y a la teoría de la comunicación de masas de Gabriel Tarde, Moscovici reconstruye la explicación que Freud dio sobre los fenómenos de las masas y que fue síntesis y remate de los trabajos de sus predecesores.
Originalmente publicado en 1981, el libro previó el advenimiento de una era planetaria de las multitudes y algunos otros rasgos de un futuro que ya es presente. Y ante un texto tan vigente, el lector contemporáneo no puede pasar por alto la advertencia que lanzar el autor: antes de hacer cualquier plan en materia de democracia, es necesario entender cómo y por qué el poder de los grandes líderes la limita o incluso la suplanta.
ÍNDICE
Nota del autor
Introducción
PRIMERA PARTE
La ciencia de las masas
SEGUNDA PARTE
Le Bon y el temor a las multitudes
TERCERA PARTE
Multitudes, mujeres y demencia
CUARTA PARTE
El principio del jefe
QUINTA PARTE
La opinión y la multitud
SEXTA PARTE
El mejor discípulo de Le Bon y Tarde: Sigmund Freud
SÉPTIMA PARTE
La psicología del jefe carismático
OCTAVA PARTE
Hipótesis sobre los grandes hombres
NOVENA PARTE
Las religiones profanas
La era planetaria de las multitudes