La Poesía de Emel Rojas Castillo es un canto inagotable de sueños, de tribulaciones, de tempestades, de fulgurantes metáforas que parecen columpiarse todavía en el arcoíris de su primera infancia.
Sus irreverentes aciertos idiomáticos lo hacen un profundo conocedor del lenguaje y un respetuoso alfarero del verbo y el predicado, desde las ausencias y la nostalgia como estandarte fundamental de su poesía.
El poeta Emel Rojas es un estudioso como pocos de la etimología y la semiología de las palabras, nos ofrenda la lucidez descarnada de sus versos en el clamor de una tumba abierta y en el destello de un farol que desplaza las sombras del cosmos, para que su amada, o su tormento, se lleve la tempestad de una partida anunciada.
CONTENIDO
Preliminares para un despedida
Hoy
Tribulación
Diciembre
La vieja mesa
Diluvio en La Granja
Amor de la vieja escuela
Para el viaje
Camino a La Granja
Sendero de esquelas
Vigilia
Plegarias del domingo
Brindis
Cautiverio
Ventanas
Laberinto
En El Palmar
Manojo de luces
Versos en la infancia
Cerca de Troya
Jardín de tunas
Silencio eterno
Enigmas
Espejo
Matices de ausencia
Incertidumbre
Tonos de olvido
Paradoja
Viejo baúl
En Efeso
Al cabo de un año
Liturgia de las olas
Epitafio
Procesión de recuerdos
Lapidaria
Inmolación
Desvelo
Lunas y dagas
Lazos
Aves sombrías
Noches