
Nació en Bogotá en el año de 1907, y murió en la misma ciudad en el año de 1961, es una mujer importante en la historia del periodismo de opinión colombiano, quien durante treinta años de vida profesional se desenvolvió principalmente en los terrenos de la columna de opinión, destacándose por su versatilidad a la hora de elegir y abordar los más diversos temas con una singular argumentación. Una de sus grandes habilidades fue la de estar en consonancia con su público, interpretar sus intereses y traducirlos en columnas que resonaron entre sus lectores. Como columnista pasaba de la crítica a la burla en temas que iban de la política, a la vida cotidiana. Como reportera fue la primera mujer en la historia de Colombia en participar activamente en una sala de redacción, buscando fuentes, investigando, caminando las calles de Bogotá. Como cronista deslumbró por su estilo narrativo, íntimo e inteligente. Como mujer rompió esquemas al no dejarse encasillar en la posición servil y silente que la sociedad les daba a las mujeres de su época.
Emilia Pardo Umaña no sólo fue una abanderada del periodismo femenino en nuestro país, sino también una mujer en la cual confluyeron multitud de contradicciones. Aunque era parte de una familia tradicional de Bogotá, eligió una profesión que nadie le aprobaba; aunque era una mujer independiente, demostraba recelo ante el voto femenino; aunque nunca se casó y hacía ostentación de su soltería, era especialmente chapada a la antigua.
Todo ese cúmulo de paradojas se da cita en esta antología, la primera que, en sentido estricto, se dedica a la totalidad de su trabajo periodístico.
CONTENIDO
RETRATO VELOZ DE EMILIA PARDO UMAÑA
Rosario del Castillo, Camándula
INTRODUCCIÓN
Lina Flórez y Pablo Pérez
I.
DE LA PÁGINA SOCIAL A LA COLUMNA DE OPINIÓN / 1934-1942
Feliz Año Nuevo
Las dictaduras engendran la libertad
Vamos pues… ¡conozca!
Un nuevo yo
¿Cómo ocurrieron las cosas el 20 de julio de 1810?
El mensaje de amor
Las pulgas en el cine
La fiesta del periodista
Mis vacaciones y mi reemplazo
Nuestro complejo idioma castellano
Las mujeres, las conquistas y las tertulias santafereñas
Alberto Galindo
Mi corredor polaco
¡Envidia! ¡Pura envidia!
El voto de las mujeres
En defensa propia
La guerra en América
[Me quedé algo atontada]
II.
LA GODA LIBERAL / 1943-1946
[¡Ya no soy conservadora!]
[¡Ay -decía el sabio…]
[La verdad es que a medida]
[He resuelto cumplir un poco con mi deber]
Año bueno de las mujeres
Carta a los directores de “El Espectador”
Desde el campo azul
Plagio a una pregunta
La orientación femenina
El fruto de las requisas
Renovarse o aburrirse
Otro atentado contra Cartagena
Comentarios
Llegaron las lluvias
En Colombia primero se descubre la conspiración y después se realiza
¡Por salvar la caja!
¡Huy! ¡Política y toros!
Un poco de orden
Comentarios
III.
CRONISTA DE VIAJE / 1947-1950
Visión de Alcalá de Henares
La feria de Sevilla
El recuerdo lacerante de Manolete
Camino del vagabundo
Visión y gloria de Cataluña
Una ciudad de cuento
En Santiago de Compostela
La falda larga
Zaragoza
¿Hay una crisis de la tauromaquia?
La serenata
Las cartas que se pierden
¿Cuál es la fiesta española?
Regreso
La cara sucia
Mezclilla
Historia del primer órgano de Bogotá
IV.
CRÍTICA, AUTOBIOGRÁFICA Y MORDAZ / 1951-1961
El espadón del héroe
Don Tomás
La huaca
Dolor sin consuelo
Un poco de agua
“Ser… es la cuestión”
Un empleíto envidiable
De rabito crespo
Mis amigos Moratos
¿Existe una intelectualidad femenina?
Hablando con Bogotá. Qué piensan los que se fueron
El tiempo de los centenaristas
La casa de los Uribe
“El Mercurio” por dentro
La casa del Florero
Colombia, “la de los grandes destinos”
No más impunidad
Mis recuerdos de Alfonso López
El solitario de diamante
La solución
Cambio de casa
ICONOGRAFÍA
CRONOLOGÍA