Una forma diferente de acercarse a una de las más grandes obras de la literatura castellana, El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de La Mancha, de Miguel de Cervantes Saavedra, haciendo uso de un lenguaje distensionado y coloquial, a todas luces único e interesante, muy propio del hablar colombiano, especialmente de la provincia de Ocaña, Norte de Santander.
Don Quijote y Güicho Panza, que comenzó como un homenaje del autor en el cuatricentenario de la publicación de la primera parte de la obra cumbre de Cervantes, inicialmente pretendiendo ser una simple relectura de su texto original, terminó en esta reescritura, que procura abordar la primera parte de esta hermosa y amena historia de una manera sencilla y ocurrente, de tal forma que resulte para todos interesante y liviana en todo su contenido, pero conserve su esencia original.