Doctora por el Radcliffe College, es profesora emérita del departamento de Historia de la Universidad de Michigan, donde ocupó la cátedra Alice Freeman Palmer entre 1975 y 1988. Experta en la Revolución francesa, publicó a lo largo de más de una década una serie de artículos sobre el impacto de la imprenta en la sociedad europea posterior a la edad media, los cuales dieron lugar a La imprenta como agente de cambio, que desde su publicación ha merecido el reconocimiento y la crítica de académicos de diversas disciplinas. Ha recibido becas de la Guggenheim Foundation, la Rockefeller Foundation y el National Endowment for the Humanities. A comienzos de los años noventa, la National Coalition of Independent Scholars estableció el premio Eisenstein-DeLacy, para reconocer cada dos años el mejor artículo académico de sus miembros. Es autora de numerosos artículos y reseñas, así como de varios libros.