
En el año de 1983 tuve la ocurrencia y el deseo de escribir una novela que se llamaría “El último muisca” o “Itzamaní o la sangre del cóndor”; así, me ocupé de tal proyecto, visitando instituciones y abordando alguna bibliografía, Un tiempo después, me enteré de las ideas que se debatían en la obra de Fenimore Cooper. El último de los mohicanos. La inspiración me había llegado un poco tarde. No quería escribir una novela que, aunque escrita en otra latitud, en otro tiempo, y en otro estilo, pareciese una imitación, en la opinión de unos, o plagio en la de otros. Desistí de tal proyecto.
Enterado de la convocatoria al “Premio Gonzalo Jiménez de Quesada”, de la Academia de Historia de Bogotá, con ocasión de los 450 años de la ciudad, decidí que era tiempo de sacar a la luz tantas cosas sepultas, de permitir que corrieran tantas aguas estancadas.
Deliberadamente, tratando de ser lo más didáctico posible como exige la convocatoria, utilizo la narración literaria de manera que simule la narración oral, puesta en boca de Itzamaní. Omito toda suerte de citas al pie de página que, de uno u otro modo, enturbiarían el discurso y le quitarían fuerza y vivacidad: sin embargo, mi intención no es desconocer las fuentes. Recomiendo revisar la bibliografía.
Finalmente espero que esta obra contribuya a la interpretación de la “otra” historia; sea un breve, pero muy sentido homenaje a nuestros indígenas latinoamericanos y un reconocimiento de esa sangre que todavía corre en muchas venas nuestras. Bogotá, noviembre de 1988
CONTENIDO
Nota preliminar
Buscando raíces ancestrales
Chiminigagua crea el mundo
Los chibchas pueblan la tierra
Cazadores y recolectores
Chibchacun inunda la Sabana
Bochica: Dios civilizador
Los clanes de filiación materna
La leyenda de Guatavita
Chaquén castiga a Tintoba y a Súniba
Orfebres del cobre y el otro
Los muiscas, pueblo industrioso
Origen de la laguna de Tota
Nuestros sabios gobernantes
Nuestras festividades
Pueblo de guerreros, pacíficos y laboriosos
La escritura sagrada
Cuentas y medidas
Las profecías
Los bacataes marchan sobre los hunzas
Se pacta la paz por cuarenta lunas
Las profecías empiezan a cumplirse: Jiménez de Quesada ha llegado
Larga y tediosa fue la travesía
La Tora, tierra buena
El Valle de los Alcázares
La fantasía de “El Dorado”
Bacatá es nombrada Santa Fe de Bogotá
La segunda fundación de Santa Fe
Tres colosos se encuentran
Nuestras tierras son repartidas
Los indígenas no somos animales ni subhombres
Las leyes nos protegen. Las prácticas nos violentan
Nuestras tierras son colonizadas
Nuestra cultura es negada
Santa Fe de Bogotá, una ciudad próspera
¡Itzamaní! ¡Itzamaní! Se ha ido
Biografías
Antología de textos de la conquista y la colonia
La reacción de un panche
Idea del Nuevo Reyno de Granada
Rasgo sobresaliente de humanidad
Breve diccionario de la cultura muisca
Bibliografía
Actividades