9 de marzo de 1990

Catorce meses. Eso duró la negociación hace treinta años entre el gobierno del presidente Virgilio Barco y el M-19. El 9 de marzo de 1990 las dos partes firmaron un acuerdo subversivo y, al mismo tiempo, su ingreso a la vida civil y la opción de participar en la política.

El encargado de llevar a buen puerto la difícil negociación fue el entonces consejero de Paz, Rafael Pardo Rueda, quien se rodeó de un eficaz equipo de asesores. El proceso de paz con el M-19 fue exitoso porque varios de sus dirigentes han ocupado importantes cargos públicos y en forma reiterada han sido elegido a cargos de elección popular.

Este viaje a las profundidades del proceso que termino con la dejación de armas de uno de los grupos subversivos más relevantes de la década del ochenta.

CONTENIDO

Presentación

Capítulo 1. El país en guerra. El M-19 se acerca

Capítulo 2. Primeros encuentros con el M-19

Capítulo 3. El viacrucis de una cita

Capítulo 4. La paz sobrevive al narcoterrorismo

Capítulo 5. Un traje a la medida para Pizarro

Testimonios de una época   

1. Vera Grave. No es la guerra: es la paz la que construye la verdadera historia
2. Ricardo Santamaría. Hay una Colombia que perdonó y está forjando un nuevo camino
3. Antonio Navarro. El paso de los años nos demostró que el alzamiento armado no tenía salida; el que primero lo entendió fue Carlos Pizarro  
4. Otty Patiño. Pizarro ya no era guerrillero; estaba jugando, había cruzado la raya y dar un paso atrás era muy complicado
5. María José Pizarro. En la época actual, el hoy, creo que la lucha armada es un contrasentido
6. Carlos Eduardo Jaramillo. Las Farc veían el eme como un grupo liviano, de bailadores
7. Everth Bustamante. Jaime Bateman y Álvaro Uribe representan los esfuerzos de lucha por la democracia desde dos ópticas diferentes
8. Carlos Alonso Lucio. En el M-19 lo difícil lo hacemos ya y en lo imposible nos demoramos un poquito